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Entendiendo la revolución Bitcoin

Advertencia sobre este artículo

No, no voy a hablar de la explosiva valuación del Bitcoin, ni de los números de crecimiento, ni de las empresas que están invirtiendo en él. Eso lo puedes leer en cualquier sitio de noticias. Mi punto es hacerte pensar profundamente lo que significa “Bitcoin” y a partir de ahí, tomes decisiones. Tómate una buena bebida. Toma tu cuaderno para hacer apuntes. Porque esta es, la mejor hora que invertirás por mucho tiempo. ¿Estás listo? Bienvenido a la BCI.

Mira a tu alrededor. Hemos diseñado una sociedad basada en la centralización. Hemos centralizado la administración en un Gobierno que cada cierto tiempo seleccionamos democráticamente. Hemos creado Instituciones que administran nuestras riquezas llamados Bancos. Hemos creado fronteras que delimitan nuestros territorios. Hemos centralizado el poder para “funcionar” como sociedad.

Pero Bitcoin no centraliza el poder. Bitcoin no tiene oficinas o ventanillas para quejas y servicio al cliente. Bitcoin no tiene un gobierno. Bitcoin no es democrático. Bitcoin es la antítesis de lo que conocemos como sociedad. Es una protesta silenciosa, una antítesis de cómo funciona el mundo que diseñamos. Bitcoin nace con la cultura de internet, nodos distribuidos que hacen poderosa a una red descentralizada. Bitcoin es un sistema de información monetaria que se encuentra en una plataforma de tecnología llamada “blockchain”. Blockchain eventualmente será convertirá en el único mecanismo de “confianza” y honestidad humana. Bitcoin es la democratización y fragmentación de todo. Tesis y antítesis, dialéctica pura. 

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Un poco de historia detrás de Bitcoin.

Desde el día uno del nacimiento de Bitcoin me pareció un planteamiento fascinante: ver una nueva moneda / divisa como el dólar, el peso o el euro, pero completamente digital con código abierto y basado en un protocolo P2P convirtiéndolo en una divisa completamente descentralizada que no depende ni de un gobierno ni de un banco central, sino de los usuarios que conforman la red. Fascinante. Punk. Desafiante. Contracultural. Anti status-quo. 

El problema era que nadie sabía quién era el creador. Y puedo entender que el “creador” no diera la cara por una razón: años antes del nacimiento de Bitcoin un proyecto había hecho exactamente lo mismo por la industria de la música: Napster. Y todos sabemos las consecuencias que tuvo el “creador” de ese movimiento cultural (Shawn Fanning).

Fue hasta 2009, cuando supimos la autoría intelectual de este planteamiento revolucionario; su nombre (más bien usado como alias) “Dorian Prentice Satoshi Nakamoto”, publicó un documento en donde explicaba los fundamentos detrás del Bitcoin. Ya con este documento creado y publicado, el bitcoin empezó a cotizar el 19 de julio del 2010 con el valor de 8 centavos de dólar.

El problema es que hasta el día de hoy no sabemos si Nakamoto es real, es un ser humano o un grupo de seres humanos que crearon el protocolo Bitcoin y su software de referencia. Por esta razón, a pesar de estar seducido por la idea, nunca compré ni compraré un Bitcoin, porque en el fondo, no sabes si estás siendo parte realmente de un movimiento intelectual lleno de cultura digital o eres parte una división del narcotráfico con financiamiento de avanzada en términos tecnológicos. En lo personal hasta que el verdadero creador no de la cara, no confiaré en esto plenamente.

También debo confesar que estoy atento a Craig Steven Wright, un empresario y científico australiano que, en 2015, reconoció que él es Satoshi Nakamoto, información que fue validada por Hal Finney, un influyente criptógrafo, reconocido como uno de los ingenieros que ayudó a transformar las ideas de Wright en el protocolo de Bitcoin.

Al día de hoy todavía tengo mis dudas, pero lo cierto es, que esta fue la primera vez que el mundo conoció a una tecnología que sintetizó muchas de las ideas existentes e hipótesis de innovación de la comunidad ciberpunk originada por internet y las ideas de William Gibson: el Bitcoin. La abreviatura oficial del Bitcoin es BTC y su símbolo es una B atravesada con una o dos líneas verticales ฿ parecidas a la línea del dólar, aunque sin parte media. 1 BTM se puede dividir en 1000 BTMs o mBTCs, que vienen a ser milésimas partes de un BTC. Para evitar la inflación, la cantidad de Bitcoins que se generarán tiene un tope de 21 millones, cantidad que se liberará de forma regular y controlada hasta el año 2140.

¿Por qué el Bitcoin ha llamado la atención de todos? Porque ha pasado de ser un experimento interesante en finanzas descentralizadas a ser el activo con mejor desempeño de la década, subiendo más del 10,000,000% desde 2010 y saltando 220% solo el año pasado.

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El concepto de «mining»

Seguramente te preguntarás ¿cómo consigo Bitcoins? Hay dos formas de conseguirlos:

  1. Introduciendo Bitcoins a nuestro monedero digital: podemos comprar la divisa cambiándola desde pesos, euros o dólares, y también podemos hacer el paso inverso de cambiar Bitcoins por nuestra moneda usual para que nos lo ingresen a nuestra cuenta bancaria.
  2. Minando Bitcoins o “Mining”: para que Bitcoin funcione, se necesitan bloques de datos que registran y aseguran todas y cada una de las transacciones que se realicen. Generar esos bloques de datos implica tener una computadora trabajando a máximo rendimiento, así que en síntesis, puedes utilizar la potencia de tu computadora para generar esos bloques de datos y consiguir Bitcoins a cambio. De esta forma es el propio usuario, también es el que ayuda a sacar la moneda adelante y no un banco central o un gobierno.

Bill Gates en contra de las criptomonedas

Es justamente esta labor del “mining” lo que incomoda a personas como el exCEO y fundador de Microsoft, Bill Gates, el cual en una entrevista con Bloomberg TV , mencionó que Bitcoin no es para todo el mundo y que solo la persona más rica del mundo debería considerar invertir en estas monedas. Gates piensa que el Bitcoin no es positivo para el medio ambiente y esta no es la primera ocasión que Gates la critica.

“Bitcoin usa más electricidad por transacción que ningún otro método inventado por la humanidad»
Bill Gates

Confirmemos un punto: las transacciones con Bitcoins se realizan sin intermediario entre los propios usuarios (como Napster). Una red descentralizada de computadoras mantiene un registro de todas las transacciones. Estos forman una especie de cadena de enlaces o bloques virtuales. Cada nueva transacción forma un nuevo eslabón en la cadena. Esto es lo que se conoce como tecnología “blockchain”.

Las transacciones entre usuarios de Bitcoin también se verifican antes de que se agreguen a la cadena. Esto lo hacen los llamados “mineros”, que tienen que resolver un complicado procesamiento de cálculos. Es un umbral para garantizar que nadie utilice la moneda virtual de forma fraudulenta. Como recompensa, cosa que ya expliqué más atrás en el artículo, los mineros reciben bitcoins nuevos. La pregunta es ¿qué significa toda esta actividad para el consumo de energía?

A medida que los mineros reciben nuevos bitcoins a cambio de sus cálculos, más y más personas quieren literalmente sacar provecho de esto. Están utilizando poder de cómputo cada vez más potente. Los mineros profesionales están conectando una gran cantidad de computadoras a la red, por lo que las instalaciones de almacenamiento se llenan en todo el mundo. Estos se conocen como “granjas mineras de Bitcoins”. Lo cual consume mucha energía, porque todo el tiempo las computadoras no hacen nada más que realizar cálculos complejos.

El Centro de Finanzas Alternativas de Cambridge, de la Universidad de Cambridge en el Reino Unido, desarrolló una herramienta para estimar el consumo de energía de los Bitcoins. Utilizando un precio medio de $0.05 dólares y teniendo en cuenta la demanda de energía de la red Bitcoin, es posible estimar cuánta electricidad se consume en un momento dado. Así es como calcularon el índice de consumo de electricidad de Bitcoin. Los investigadores llegaron a un consumo energético anual de 121.06 teravatios-hora (TWh) lo cual es extremadamente alto.

Por poner un ejemplo, un teravatio-hora equivale a 1 billón de vatios-hora o mil millones de kilovatios-hora (kWh). Los teravatios hora se utilizan comúnmente para expresar el consumo de energía de los “países”. Lo que significa que la actividad actual de Bitcoin, consume más energía anualmente que Argentina y los Emiratos Árabes Unidos. Incluso que Los Países Bajos y Bélgica tienen un consumo energético anual inferior al de Bitcoin. Una sola transacción de Bitcoin consume la misma cantidad de electricidad que un Tesla que conduce el viaje de 41 horas CDMX hasta Los Cabos.

«Los bitcoins son realmente anti-eficientes. Un hardware más eficiente no ayudará, solo competirán con otro hardware eficiente. Esto significa que el uso de bitcoins y, por lo tanto, su producción de CO2, solo aumentará”
David Gerhard, un experto en bitcoins y autor del libro «Attack of the 50 Foot Blockchain”

El problema del Bitcoin

Si bien el consumo energético es un problema importante hay otro que de base es inquietante para mí. La mayoría de la gente no está comprando Bitcoin porque lo vea como una moneda revolucionaria o culturalmente relevante. La mayoría de la gente compra Bitcoin, porque espera sol una cosa… que siga subiendo de valor. El motivo real es ganar tanto dinero como sea posible. La mayoría de la gente no admitirá que la codicia es la verdadera razón por la que han comprado un Bticoin, mientras usan los fundamentos como justificación.

El escritor Ben Hunt llama a esto el Juego del Conocimiento Común: la máquina narrativa ha elegido Bitcoin como el activo que todos creen que todos los demás comprarán para proteger su riqueza contra la inflación, a pesar de que Bitcoin todavía no ha demostrado ser una apuesta a largo plazo. Es lo que la manada cree que todos los demás creen que se convierte en el “consenso”. Bitcoin se ha convertido en el símbolo del escape de los regímenes inflacionarios represivos. Incluso hemos abandonado temporalmente el oro (porque de alguna manera se ha convertido en la némesis del movimiento criptográfico).

El “Common Knowledge Game” ha convertido al Bitcoin como la principal cápsula de escape de la hiperinflación. Nos guste o no, Bitcoin está ahora mismo en una burbuja, pero eso no es malo si eres un especulador. Si no quieres invertir tú dinero en Bitcoin porque crees que es una burbuja que depende de ti y los demás, eso significa que tienes que decidir en cuál de las otras burbujas quieres poner tu dinero: ya sea el mercado de valores, el mercado de bonos corporativos, el mercado inmobiliario, el mercado de bonos, etc.

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La hipótesis The Greater Fool

El escritor de Forbes, Matt Hougan , describe este comportamiento como la teoría financiera del «Greater Fool” (el mayor tonto) del valor de Bitcoin, que establece que un tonto comprará un activo como Bitcoin a cualquier precio excesivo sin tener en cuenta su verdadero valor, porque creen que un tonto mayor eventualmente pagará un precio aún más alto.

Estoy de acuerdo con Matt Hougan. La gran mayoría de los que compran Bitcoin lo están haciendo con un solo objetivo: “ser ricos fácilmente”. Pero esa lectura y objetivo sobre el Bitcoin son muy “mediocres”. Desde mi punto de vista, el valor sobre el Bitcoin no está en “comprar bitcoins” (con altísimo riesgo), sino lo que está enseñando la hipótesis activa en el mercado.

Miren es así. En 1999 había una compañía llamada Napster que desafío al status quo de la industria musical. ¿Napster es líder hoy? No, no lo es. Pero en definitiva Napster mostró el potencial de una nueva hipótesis de innovación que posteriormente compañías como Spotify, Apple, Netflix e incluso inspiró a los fundadores del Bitcoin, que utilizaron las mismas bases, fundamentos y aprendizajes para crear las criptomonedas y la hipótesis blockchain.

“Bitcoin es el Atari de la Industria de los Videojuegos. No importa si compras Bitcoins o no, te haces rico o pobre. Lo que importa es entender el cambio y disrupción que provocarán las criptomonedas y el blockchain”
Jon Black, CEO Blackbot

Matt Hougan hace una analogía entre Bitcoins de hoy y el petróleo a fines del siglo XIX. Cuando se descubrió el petróleo por primera vez, tenía poca utilidad, poca aceptación y una percepción de poco valor. Pero gracias a Standard Oil y John D. Rockefeller, se crearon nuevos usos y mercados, logrando que el petróleo tuviera un valor e importancia enorme en la economía mundial. El ejemplo de Napster y el petróleo, justamente es lo que está pasando con el Bitcoin. La gente “está entendiendo superficialmente” el valor de las criptomonedas. Debiéramos desafiarnos a preguntarnos: ¿qué usos futuros de Bitcoin (o del concepto de criptomonedas) estaremos viendo aplicados en la sociedad? ¿Cómo la base filosófica del Blockchain, crearán disrupción a la burocracia del gobierno, a las políticas administrativas de nuestras compañías y desafiará el liderazgo y credibilidad tradicional de nuestros dirigentes? Esas son las verdaderas preguntas.

Los inversores que entiende el fenómeno, compran Bitcoin apostando a que los casos de uso futuros basados ​​en estas capacidades básicas serán mayores que la capitalización de mercado actual. Por ahora, su valor es permitir que el dinero se mueva a la velocidad de Internet y permitir que se mantenga de forma autónoma. Cosa que están logrando y esperemos que así sea siempre.

De tal forma, que el acto de comprar bitcoins hoy es el equivalente al comprar petróleo en 1850 después de ver su utilidad inicial, con la gran diferencia de que sabes que nunca se puede crear petróleo nuevo, incluso cuando la demanda crece y surgen nuevos casos de uso. En síntesis es comprar un activo escaso antes de que la demanda se desarrolle por completo.

En BCI creemos en un futuro en el que tendremos una nueva y mejorada versión de Internet. En donde el concepto de “dinero” se moverá a través de ellas como su fuera un mensaje de WhatsApp (WhatsApp por ejemplo anunció la llegada de “Carts”), donde el acceso financiero y la toma de decisiones estará disponible para todos los que tengan acceso a la tecnología.

Esa, querido lector de BCI, es la postura correcta y estaremos buscando hipótesis todo el tiempo para que siempre tengas una ventaja. Desde nuestro punto de vista Blockchain es una verdadera contribución de la tecnología moderna a la sociedad y creo que encontrará usos en muchas áreas del gobierno, las compañías, el arte, los deportes, la tecnología, la sociedad y la economía. Por esa razón creamos BCI, para estar atentos al cambio.

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¿Por qué Bitcoin no funciona como moneda?

Esa pregunta se ha convertido en el principal error de Bitcoin. Bitcoin fue concebido como una “moneda descentralizada” del futuro, pero hoy la narrativa ha cambiado y sus seguidores lo llaman una “reserva de valor” en lugar de una moneda. Para muchos especialistas, el suministro limitado es exactamente la razón por la que Bitcoin no funcionará como moneda. Como ya sabes, solo existirán 21 millones de bitcoins, por lo que siempre será un recurso digital limitado (tan solo piensa que en el mundo pronto superaremos los 8 mil millones de personas). En la teoría económica, una moneda debe expandirse (o contraerse) a medida que crece (o se contrae) la población y la producción de bienes y servicios.

Si no hay dólares o pesos suficientes para que la gente compre bienes, las empresas no pueden crecer, ni crecerán. Pero ojo, el crecimiento no está ligado al “valor” de una compañía. La teoría económica tradicional nos dice que una empresa que produce un producto insuficiente para satisfacer la demanda, los precios se dispararán y el ciclo continúa (ve ahora mismo el fenómeno de las vacunas COVID19 ¿cuánto pagarías por tener acceso a una vacuna?

En comparativa, si los precios de la moneda, como Bitcoin, se disparan, entonces la gente se amontonará en la moneda y en su lugar pagará con algo de menor valor y apreciación. Tener una moneda limitada que eleve el valor de la moneda podría ser bueno para los pocos que logran acumularla. La riqueza tiende a acumularse para quienes la tienen, y esto agrava la desigualdad de la riqueza.

Los bitcoiners deberían dejar de hablar de su cotización y volver a los fundamentos por la que fue creado. El precio al final no importa. La estabilidad de precios sí que importa. Para que el dinero sea dinero, debe demostrar que su precio se mantendrá estable durante largos períodos, y especialmente en tiempos difíciles. Pero en la realidad, a pesar de que Bitcoin comenzó como una criptomoneda, su estatus actual, es que es concebido como un criptoactivo.

En síntesis, Bitcoin no ha logrado convertirse en una moneda popular y no vemos cómo logre convertirse en una. Hay un concepto que debemos entender llamado “dinero fiduciario”. El dinero fiduciario o dinero inorgánico es aquel que no se basa en el valor de metales preciosos (como el Bitcoin). En cambio, está respaldado en la creencia general de que tiene valor, es decir, en la confianza de una sociedad por una moneda. Por ejemplo, el Dólar, la Libra Esterlina, el Euro, el Peso y el Yen son dinero fiduciario. Bajo esta idea el “Bitcoin” es un concepto de “dinero fiduciario digital”, posee una alta credibilidad y confianza de sus usuario, pero contesta es pregunta ¿si tuvieras un Bitcoin ahora mismo, comprarías con ese Bitcoin la cena de esta noche?

Sinceramente la respuesta es “no”. No usarías Bitcoin para tus transacciones diarias. No comprarías un auto con el valor. Buscarías almacenarlo y esperar a que aumente su valor por encima de la inflación para que un día, vendas ese Bitcoin a otro que lo quiera almacenar.

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El caso Papa Johns

El 22 de mayo de 2010, un desarrollador de Bitcoin llamado Laszlo Hanyecz compró lo que pudo haber sido la comida más cara en la historia de la humanidad, cuando le pagó a alguien 10,000 Bitcoins para que recogiera y le entregara dos pizzas de Papa Johns. Este incidente marca la razón por la cual las personas no usan Bitcoin para comprar: nadie pensaría en desembolsar Bitcoin por algo tan mundano como una pizza sin pensar primero en cuánto dinero podrían estar renunciando en el futuro.

Bitcoin no fue diseñado para ser un activo especulativo, fue diseñado para ser una moneda, un nuevo medio de intercambio que la gente podría, y usaría, para realizar transacciones comerciales diarias entre sí. (Es por eso que lo llamamos criptomoneda). Un sistema de pago electrónico basado en pruebas criptográficas en lugar de confianza, que permite a dos partes interesadas realizar transacciones directamente entre sí sin la necesidad de un tercero de confianza, como un banco o una compañía de tarjetas de crédito. Pero fracasó en ese intento. La gente trata al Bitcoin como un activo especulativo. Por lo tanto no lo usarán como moneda.

“Las criptomonedas básicamente no tienen valor. No puedes hacer nada con ellas excepto vendérselo a otra persona”
Warren Buffett

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¿Entonces estamos ante un nuevo oro digital?

Después de analizar el comportamiento del Bitcoin, no estoy de acuerdo con Buffet. Bitcoin es usado por las personas para almacenar ahorros fuera del sistema de moneda fiduciaria (como si fuera una especie»oro digital»), para mover dinero a través de las fronteras y para liquidar grandes transacciones de forma rápida y irreversible. Una parte importante de la economía “gig” (casi todos nómadas digitales) es pagada en bitcoins debido a que es todavía (y no sabemos cuánto tiempo será así) una forma de expatriar dinero con riesgos físicos limitados.

Bitcoin es un nuevo paradigma (como te mencione antes) y sí, sí es un nuevo concepto de «oro digital”. Quiero detenerme aquí un poco. Al igual que el oro, Bitcoin es valioso en la medida en que la gente “piensa que es valioso”: lo compra porque cree que alguien más pagará más por él en el futuro. Y al igual que el oro, un banco central no puede inflar su valor.

Los críticos señalan que el gran error del “valor» del Bitcoin, es que no está anclado a ningún activo físico como el oro. Y tampoco está vinculado a los flujos de efectivo futuros como lo están la mayoría de las inversiones.

Parece que Bitcoin se ha desvinculado por completo de su propósito original. Lo que se suponía que era una forma de revolucionar la vida financiera diaria de las personas es ahora principalmente una forma para que las personas se enriquezcan rápidamente o, en un escenario ideal, para que las personas “protejan su riqueza contra la inflación”.

“Un correo electrónico que dice que tienes oro no es lo mismo que tener oro. También podrías tener criptomonedas. El dinero es solo un dato que nos permite evitar los inconvenientes del trueque. Esos datos, como todos los datos, están sujetos a latencia y error. El sistema evolucionará hacia aquello que minimice ambos”
Elon Musk

La postura de Bitso

Bitso es una plataforma para comprar, vender y usar criptomonedas, con operaciones en Argentina, Brazil y México. Fundada en 2013 por Ben Peters, Daniel Vogel y Pablo González, se convirtió en la primera plataforma de criptomonedas de América Latina en regularse y la sexta a nivel mundial en obtener una licencia de la Comisión de Servicios Financieros de Gibraltar (GFSC por sus siglas en inglés).

En un artículo de Forbes México, entrevistaron al Chief Design Officer de Bitso, Pablo Gonzalez, que destacó que en su plataforma, que permite la compra y venta de la criptomoneda, han observado un crecimiento de 5 veces en el volumen de transacciones recientemente pero advierte que hay que tener mucho cuidado, ya que será un mercado muy volátil hasta que se encuentre un uso masivo.

“Se pueden hacer cosas que no se puede hacer con el oro: pagos, crear trazabilidad y transparencia, la seguridad con que se puede almacenar. Sí hay un caso de uso digital bastante grande, pero creo que va más allá. Creo que es un dinero global, que es aún más importante que el oro”
Pablo Gonzalez, Chief Design Officer de Bitso

₿trust, evangelizando con Bitcoin

A pesar de las críticas y los errores en la práctica, uno de los grandes defensores del Bitcoin es Jack Dorsey, fundador y CEO de Twitter y de Square, que junto con Jay-Z, crearon el proyecto “₿trust” con el objetivo de incrementar la presencia del bitcoin en países en desarrollo empezando por India y por algunos mercados del continente africano. Para ello invirtieron en 500 bitcoins. Dorsey es un simpatizante directo del Bitcoin, incluso en 2014, su plataforma de pagos “Square” lo incluyó como método de pago.

“El Bitcoin es un activismo directo contra un sistema financiero no verificable y excluyente que afecta negativamente a gran parte de nuestra sociedad»
Jack Dorsey

Los grandes entran al juego

El lunes 8 de febrero de 2021 Tesla apostó $1,500 millones de dólares en Bitcoin. El objetivo es comenzar a aceptar bitcoins como forma de pago para sus productos en un futuro cercano, sujeto a las leyes aplicables e inicialmente de forma limitada.

Pero honestamente nosotros vemos dos usos de Tesla:

Este movimiento es parte de la relevancia de la conversación que Bitcoin tiene en el mundo desde 2019. Por ejemplo Paypal, otra compañía de Elon Musk, anunció en octubre de 2020 que sus clientes podían comprar, mantener y vender criptomonedas. Esto incluye Bitcoin, Etherium, Bitcoin Cash y Litecoin. Recuerda que Paypal tiene 346 millones de cuentas activas y es utilizado por 26 millones de comerciantes en todo el mundo. Un giro interesante a la historia de Paypal es que los comerciantes no recibirán monedas virtuales en los pagos, sino monedas normales como el dólar estadounidense.

Square también anunció en octubre de 2020 pasado, que había agregado 4,709 Bitcoins, por un total de $50 millones de dólares, a su aplicación Cash. Visa, una empresa más grande que Paypal y Square juntas, ha realizado varios movimientos favorables a las criptomonedas. Estos incluyen el lanzamiento de tarjetas de crédito y débito Bitcoin con la marca Visa, y la inversión en empresas de criptomonedas como Anchorage. Mastercard, no queriendo quedarse atrás, anunció planes para apoyar al movimiento.

“En última instancia, el mundo tendrá una moneda única, Internet tendrá una moneda única. Personalmente creo que será bitcoin”
Jack Dorsey, CEO tanto de Twitter como de Square

Quizás uno de los mayores compradores corporativos de Bitcoin es una empresa llamada MicroStrategy, una plataforma de análisis de negocios que actualmente tiene 71,079 monedas digitales por valor de más de $3 mil millones de dólares.

Con base en información de Bloomberg, una unidad de inversión de Morgan Stanley (Counterpoint Global) está explorando una participación en Bitcoin. Si ocurriera, la inversión de Counterpoint Global sería uno de varios movimientos de alto perfil hacia la criptomoneda de empresas, bancos y firmas de inversión bien establecidos. Bank of New York Mellon, la institución financiera más antigua del país, planeaba ofrecer transacciones con bitcoins, según The Wall Street Journal.

También Uber podría aceptar Bitcoin y otras criptomonedas como forma de pago. Si bien la empresa no comprará Bitcoins, como lo hizo Tesla, Dana Khosrowshahi, CEO de Uber, mencionó que la compañía consideraría aceptar criptomonedas a futuro. Khosrowshahi consideró que el uso de criptomonedas es bueno para los negocios y que podría favorecer a los conductores y repartidores. Lo cierto es que este es el único interés de la compañía en ese rubro.

Y finalmente BBVA a partir de enero de 2021, permite a sus clientes comprar, vender y custodiar Bitcoin desde sus plataformas. Todo comenzará mediante su filial en Suiza.

“Los activos digitales tienen un gran potencial para transformar la forma en que se intercambia valor e información a través de la tecnología ‘blockchain’. Las instituciones financieras, en colaboración con los supervisores, pueden jugar un rol relevante en la integración de los activos digitales en los mercados e infraestructuras actuales. BBVA permitirá comprar criptomonedas «con todas las garantías de cualquier otro servicio financiero, con un sistema para operar de forma transparente y muy sencilla”
Alicia Pertusa, responsable de Estrategia en Client Solutions de BBVA.

La primera empresa del ecosistema Bitcoin que saldrá a bolsa

Coinbase la plataforma de criptomonedas (exchange) más fiable del mundo digital, saldrá a bolsa este año 2021. Comenzaron en el año 2012, fundada en por Brain Armstrong (actual CEO) y Fred Ehrsam; con la idea radical de que cualquier persona, desde cualquier lugar, debería poder enviar y recibir bitcoins de una manera sencilla y segura. En la actualidad, ofrecen una plataforma de confianza y fácil de usar para acceder a la criptoeconomía en su sentido más amplio. Durante este tiempo, han ayudado a crear “la criptoeconomía”; como un sistema más justo, accesible, eficiente y transparente posible gracias a las criptomonedas.

Hoy Coinbase tiene aproximadamente 43 millones de usuarios verificados, 7000 instituciones y 115.000 colaboradores del ecosistema de más de 100 países confían en Coinbase para invertir, gastar, guardar, ganar y usar criptomonedas de un modo seguro y sencillo. Ofrece complementos para que tiendas online puedan recibir pagos con criptodivisas y se está convirtiendo en un banco de Bitcoins que vive del cobro de comisiones por operaciones de compra y venta.

Nano, un nuevo jugador

Y aquí viene un nuevo jugador: Nano. ¿Se acuerdan de mi analogía de Napster y Spotify? Todos los errores, aprendizajes y estela de conocimiento que está dejándonos Bitcoin, terminará siendo capitalizado por alguna otra propuesta de valor que lo resuelva. Nano es una moneda digital instantánea, descentralizada, escalable y energéticamente eficiente, sin comisiones, destinada a pagos grandes y pequeños y al almacenamiento de valor. Nano promete ser la moneda descentralizada más rápida que existe, con un tiempo medio de transacción de menos de un segundo.

Nano resolvió el tema del consumo eléctrico, ya que consume poca energía principalmente porque no depende de que los mineros realicen pruebas de trabajo costosas para proteger la red. Puedes realizar 6 millones de transacciones Nano con la energía consumida por una sola transacción de Bitcoin. La mayoría de las monedas descentralizadas están inherentemente limitadas por el protocolo, como el límite teórico de Bitcoin de 7 tx / s. Nano escala con el hardware de sus nodos, lo que significa que no tiene límite teórico.

La mayoría de las monedas descentralizadas se basan en una única cadena de bloques compartida donde los usuarios compiten por tarifas para convencer a los mineros de que confirmen y agreguen sus transacciones. Nano tiene una cadena de bloques por cuenta que solo el propietario de la cuenta puede modificar y, en lugar de depender de los mineros para asegurar la red, utiliza un sistema de votación abierta por representantes.

Nano tiene un suministro fijo de 133 millones, todo en circulación a través de un sistema de grifería CAPTCHA donde personas de todo el mundo resolvieron CAPTCHA a cambio de Nano. La mayoría de las monedas descentralizadas tienen finalidad probabilística, lo que significa que nunca se garantiza al 100% que una transacción sea definitiva. Nano tiene una finalidad determinista, lo que significa que se garantiza que las transacciones serán irreversibles una vez que el destinatario vea un peso de votación del 51% de los nodos representativos, lo que en promedio toma menos de un segundo.

Bitcoin se ha vuelto menos descentralizado a lo largo de los años debido a cómo las economías de escala incentivan a los mineros a formar grupos cada vez más grandes. Nano no depende de los mineros para administrar la red, lo que significa que no tiene incentivos que la lleven hacia la centralización. Si se mide por el coeficiente de Nakomoto, Nano se está volviendo más descentralizado día a día y ya está por delante de Bitcoin.Bitcoin no cumplió sus promesas y ha demostrado no ser funcional como moneda, pero Nano ha recogido la antorcha y está ganando conciencia rápidamente.

El caso Dogecoin y por qué deberías entenderlo profundamente

Dogecoin se lanzó el 6 de diciembre de 2013, utilizando el código base de Litecoin, que a su vez es una rama de Bitcoin. Fue desarrollado por los ingenieros de software Billy Markus y Jackson Palmer, quienes decidieron crear un sistema de pago como una broma inspirada en el meme del perro Shiba Inu, que también se remonta a 2013. El meme generalmente consiste en una imagen de un perro Shiba Inu acompañado por texto multicolor en fuente comic sans en primer plano. El texto, que representa una especie de monólogo interno, está escrito deliberadamente en un inglés muy roto.

Dogecoin es diferente de otras criptomonedas porque es esencialmente “una marca” que las personas entienden, se relacionan, utilizan, comparten y en muchos sentidos, adoptan en su vida. Los creadores de Dogecoin hicieron un “altcoin” (las altcoins nacieron con la firme intención de diversificar y mejorar el ecosistema cripto con opciones más allá del Bitcoin. Una altcoin hace referencia a cualquier criptomoneda que no es Bitcoin y que engloba en un mismo término a criptomonedas y tokens), como una criptografía de memes para las personas a las que no les importaba la criptomoneda tradicional pero que aún querían divertirse, conservando el espíritu “meme-y”.

Sí me preguntas cuál es el éxito más grande de Internet de los últimos 25 años, tengo una respuesta: la cultura del meme. El “meme” es el mecanismo de máxima difusión, penetración, evolución, consolidación y adopción de la historia de Internet. Poner ese nivel de explosividad y sumarlo a la “teoría de las criptomonedas”, me parece un fenómeno de alta relevancia y observación.

Dogecoin se considera más que una criptomoneda, es un producto cultural, en lugar de un activo financiero, ya que en realidad pocos usuarios de criptomonedas la consideran una inversión seria o para usar en transacciones regulares. En cambio, poseer Dogecoin es participar en una cultura. Es como el incidente “GameStop”, fuimos testigos de hasta qué punto los memes son capaces de mover los mercados. No fue solo la difusión de una idea, sino la difusión de un comportamiento, un statement con efectos e incidencia en el mundo real.

«La idea de que dogecoin valga 8 centavos es la misma que GameStop vale $325, no tiene sentido. El resultado más entretenido y el resultado más irónico sería que Dogecoin se convierta en la moneda de la Tierra en el futuro”

Si algo hemos visto de Internet, es que los memes pueden mover los mercados más allá de las expectativas de cualquiera. Después de todo, somos seres emocionales y las redes sociales, han logrado mover nuestros hilos emocionales de tal manera que los activos culturales parecen levitar y la gravedad parece estar tirando de los matices financieros más allá de nuestro alcance. En este momento, invertir en Dogecoin es participar en el zeitgeist cultural de los tiempos en el que la Cultura Digital se apropia de todo.

Elon Musk piensa que Dogecoin podría convertirse realmente en ‘la moneda de Internet’ si estuviera menos centralizada y los principales inversores en la misma aceptaran vender parte de sus depósitos. ¿Te imaginas ese escenario? Bitcoin no logrando ser una moneda transaccional pero Dogecoin sí. Al final, el objetivo de una moneda es intercambiarla por bienes y servicios. Ese intercambio no está sucediendo todavía con el Bitcoin pero ¿qué pasaría si Dogecoin lo lograra?

Regular las criptomonedas

La explosividad del Bitcoin en 2021 encendió la discusión sobre las criptomonedas funcionando como dinero pero la aceptación como medio de pago representa un reto paradigmático para los bancos centrales del mundo, pues implica ceder el control de la oferta monetaria, ya que en palabras de los Bancos, se perdería el control de la oferta monetaria y se replantaría la forma como cotizan las divisas y se mueven los capitales financieros en el mundo.

Ante tal contexto, algunos países buscan la regulación debido a las restricciones y prohibiciones que tienen sobre la moneda digital, sobre todo si sienten que Bitcoin está impactando negativamente su moneda tradicional. La forma más probable de que Bitcoin y otras criptomonedas distribuidas “no reguladas” sean desplazadas, es mediante criptomonedas federales reguladas y centralizadas. El objetivo de la acción reguladora del gobierno es destruir el valor del Bitcoin.

Dan Nathan, fundador de Risk Reversal Advisors, dice que el gobierno de Estados Unidos no seguirá permitiendo que corporaciones como Tesla de Elon Musk, reemplacen dólares por bitcoins. No «dejarán que el dólar deje de ser la moneda de reserva para el mundo», lo que podría suceder si las corporaciones siguen reemplazando dólares en sus balances por bitcoins.

En el diario El País se publicó un artículo en donde El Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores, en un comunicado conjunto, advertían sobre los peligros que conlleva invertir en criptodivisas debido a su “extrema volatilidad, complejidad y falta de transparencia” pero sobre todo, porque no están respaldadas por ningún banco central.

En septiembre del 2020, la Comisión Europea hizo pública una propuesta para la regulación del mercado de criptoactivos, conocida como MiCA (Markets in Crypto-Assets). El objetivo de esta propuesta es establecer un marco normativo para crear un entorno seguro que beneficie a los consumidores e inversionistas. Establecerá un régimen para la emisión de aquellos criptoactivos que no están actualmente cubiertos por la legislación vigente sobre servicios financieros y regulará a los proveedores de servicios sobre criptoactivos.

“No podemos permitirnos ningún grado de error”
Agustín Carstens, Gerente general del Banco de Pagos

Facebook y su stablecoin

En 2018 Facebook anunció su intención de lanzar libra, una moneda electrónica para su comunidad de usuarios, diseñada sobre protocolo de blockchain. El anuncio conmocionó al sector bancario mundial, pues suponía crear una moneda para 2.500 millones de usuarios, sin un organismo supervisor de respaldo. De esto ya hablamos en este artículo de BCI.

Facebook busca liberar su propia “stablecoin”, que buscan minimizar la volatilidad de las criptomonedas. Para ello, el emisor de la stablecoin vincula su valor al de otro activo más estable, como otras monedas (el dólar) o productos (metales preciosos). Con este concepto Facebook presentó “Libra”, una moneda privada, digital, y global pensada actualmente como un “stablecoin”, es decir, su valor estará vinculado a una cesta de divisas internacionales. Para respaldar esta vinculación, la Asociación Diem se compromete a mantener, a modo de reservas, depósitos e inversiones denominadas en las principales divisas internacionales, como el dólar y el euro, por un monto equivalente al de las libras que emita.

La evolución del valor de libra, por tanto, debería ir de la mano del de las divisas que compongan la cesta. Los que deseen comprar libras, lo deberán hacer a través de distribuidores autorizados (casas de cambio y bancos), que son los que podrán comprar libras a la Asociación a cambio de divisas de la cesta y vender libras a los usuarios a cambio de su moneda local. En este caso, estará respaldada por el dólar estadounidense, y un «Libra» (en el caso de llamarse finalmente así) tendrá el mismo valor que un dólar. Es decir, su valor dependerá de lo que valga el dólar (LibraUSD o ≋USD).

El proyecto en papel luce sólido, ya que posee un altísimo potencial de adopción y los otros socios de la iniciativa libra son big players ampliamente establecidos en el mercado de pagos y aplicaciones de móvil. La misión de la Asociación Diem es habilitar un sistema de pago global simple y una infraestructura financiera que empodere a miles de millones de personas.

Una stablecoin global como libra, enfocada al uso minorista, puede abaratar y facilitar los pagos y las transferencias internacionales al reducir los costes de transacción. Asimismo, puede llegar a usuarios que actualmente no tienen acceso al sistema financiero, al permitirles almacenar su dinero y ejecutar transacciones desde su teléfono móvil.

Según indica el Financial Times, The Libra Association, ahora llamada “Diem  Association” espera lanzar su primera stablecoin durante el 2021. Esta moneda virtual estará respaldada por el dólar estadounidense y a diferencia de las criptomonedas puras, no fluctúa en valor frente a la moneda por la que es respaldada. En otras palabras: su valor depende íntegramente del valor que tenga siempre el dólar.

El lanzamiento de Libra necesita el visto bueno de la Autoridad de Supervisión del Mercado Financiero (FINMA). El regulador de los mercados financieros independientes de Suiza supervisa bancos, compañías de seguros, instituciones financieras y más, con el fin de que operen de manera eficaz. La autorización de FINMA estaría disponible a inicios de 2021. De aprobarse, Libra competiría con criptomonedas como el USD Coin (USDC) , Tether (USDT)  o TrueUSD (TUSD) . Todas son monedas relativamente estables, vinculadas al dólar estadounidense.

Facebook también planea lanzar una cartera virtual para operar los activos de Libra. En un principio se iba a llamar Calibra, aunque posteriormente han rediseñado la marca y ahora ha pasado a llamarse Novi. Diem Association indicó que entre sus planes está el crear otras stablecoins para las principales divisas del mundo, incluido el Euro o la Libra británica siempre y cuando estén de acuerdo los reguladores de cada país y región donde Libra quiera operar. La mala noticia es que la Unión Europea confirmó en agosto de 2020 que iniciarían una investigación contra Libra por su potencial comportamiento anticompetitivo, provocando que compañías como PayPal, Visa y Mastercard se deslindaron del proyecto y abandonaron la Asociación.

En síntesis de este proyecto podemos decir que:

https://www.youtube.com/watch?v=BE12dZwSKU8

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Ethereum la próxima gran apuesta

Ethereum es una tecnología que alberga dinero digital, pagos globales y aplicaciones. La comunidad ha construido una economía digital en auge, nuevas formas audaces para que los creadores obtengan ingresos en línea y mucho más. Está abierto a todo el mundo, esté donde esté en el mundo; todo lo que necesita es Internet.

Ethereum es una plataforma open source, que sirve para programar contratos inteligentes. La plataforma es descentralizada a diferencia de otras cadenas de bloques. Es programable, lo que significa que los desarrolladores pueden usarlo para crear nuevos tipos de aplicaciones descentralizadass (dapps) que obtienen los beneficios de la criptomoneda y la tecnología blockchain.

En este momento, miles de desarrolladores de todo el mundo están creando aplicaciones en Ethereum como:

Con Ethereum , el juego se volvió complejo, robusto y definitivamente, aprende rápido de todos los ejercicios anteriores de criptmonedas y blockchain. Bitcoin es fácil de entender: oro digital de movimiento lento. Cuando la gente dice que Bitcoin es una moneda o que no se utiliza para realizar compras, demuestra que no lo entiende. Bitcoin es una cuenta de ahorros a largo plazo protegida de la inflación mediante código, gracias a la escasez (solo hay 21 millones de bitcoins).

Ethereum es la segunda criptomoneda más grande. Se lanzó en 2015. Vitalik Buterin es el creador de la idea plasmada en ethereum con la ayuda de varios cofundadores Y la apuesta más importante, es que la próxima generación de tecnología serán tecnologías descentralizadas habilitadas para blockchain, justo como Ethereum. De ahí viene la importancia total que tiene en el futuro. Muchas criptomonedas se basan en Ethereum, lo que aumenta aún más su utilidad y valor. Y algo que nos volvió locos, es que Ethereum ayudó a habilitar Defi (finanzas descentralizadas), la cual toma todos los productos financieros existentes que ya utilizamos y elimina a los intermediarios, lo que elimina los costos.

Ethereum es una tecnología que te permite enviar criptomonedas a cualquier persona por una pequeña comisión. También potencia aplicaciones que cualquiera puede usar y nadie puede derribar. Es la blockchain programable del mundo. Ethereum se construye sobre la innovación de Bitcoin, pero con grandes diferencias. Ambos te permiten utilizar dinero digital sin proveedores de pago o bancos. Pero Ethereum es programable, así que también puedes utilizarlo para diferentes activos digitales, incluido Bitcoin.
Esto también significa que Ethereum es más que pagos. Ethereum es un mercado de servicios financieros, juegos y aplicaciones que no pueden robar tu información o censurarte.

Ethereum es una forma de arreglar la propiedad y usar el código para verificar la confianza, en lugar de las personas que se benefician de aprovechar el sistema de confianza actual. Los bancos, las bolsas de valores, las empresas de tarjetas de crédito (Visa, Mastercard, Amex) se verán desplazadas. Eso es lo que Ethereum ya está comenzando a habilitar, lentamente. En síntesis, Ethereum tiene el potencial de valer mucho más que Bitcoin a largo plazo y ningún gobierno o empresa tendrá el control sobre Ethereum.

Ethereum crece como las redes sociales gracias a un concepto conocido como “direcciones”. Una dirección es como la cuenta de un usuario. A medida que aumenta la cantidad de cuentas de usuario, al igual que con Facebook, Twitter, Spotify, Netflix, etc; el precio por moneda y el valor total de la red también aumentan. Este fenómeno se conoce como Ley de Metcalfe y es justo la razón por la que yo apostaría mucho en el futuro de esta plataforma.

Desde mi punto de vista Ethereum está cambiando silenciosamente el mundo y aprendiendo de lo que está haciendo mal el mundo de Internet y la experiencia de las primeras criptmonedas y blockchains. Creo definitivamente que el futuro de Internet no será propiedad de unas pocas empresas de tecnología; el futuro de Internet volverá a ser propiedad de los usuarios. Los usuarios serán dueños de sus datos y de su destino. Ethereum tiene todas las características para evolucionar y convertirse en el próximo gran motor después de Bitcoin. Un gran disruptor del sistema financiero global y ser la plataforma en la que se basan todas las futuras aplicaciones descentralizadas. Ethereum todavía tiene un largo camino por recorrer y recién está comenzando. Bitcoin es grande.

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En conclusión

Si quieres una pieza de la historia que se está construyendo compra un Bitcoin (sobre todo cuando venga la siguiente gran caída), no solo te permitirá entender cómo funcionan las criptomonedas, sino que te dará un entendimiento en activo de la cultura digital detrás de ellas. Compraría algunos Dogecoins, debido al potencial de la ironía (mira que la ironía en internet es poderosa) y desde mi punto de vista es más viable que comprar “Funkos” coleccionables.

Para enriquecer la cartera, compraría algunos Nanos, solo por ver cómo evoluciona. Pero donde voltearía definitivamente a poner toda mi atención es en el desarrollo de Ethereum y no solo en la moneda, sino en preguntarme cómo todo el ecosistema aplicado al gobierno, a la economía, a la política, al entretenimiento, etc; será disrumpido con Blockchain a través de Ethereum. Ahí está el futuro.

Sí, la moneda Facebook podría convertirse en la moneda más popular. Pero nunca podrás comprarla realmente. Así que transaccionaremos con ella todos los días, pero convertiremos nuestras riquezas a otras monedas digitales.

Al final de toda esta extensa tesis necesitas entender que Bitcoin es el “Atari” de una idea que está desafiando la propiedad, desafía al capitalismo, desafía al “poder”, desafía al statusquo y cuando esos principios se popularizan (y lo están haciendo)… todo cambiará radicalmente. Ver a empresas públicas como Tesla entrar, es solo la antesala masiva de lo que viene.

Bitcoin es el ruidoso módem de 56K de la primera iteración de Internet.
Ethereum podría convertirse en el competidor de banda ancha de alta velocidad que aprendió de Bitcoin. Facebook será la corriente eléctrica. Pero la data, las apps, la economía, la riqueza de esa red… nos toca inventarla juntos.

Es esto o sigue haciendo lo mismo de siempre, invertir en acciones de Etoro, oro, bienes raíces, bonos, derivados, cuenta de ahorros, etc; te darás cuenta que los productos financieros existentes están rotos.

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